Batalla de Puebla

El 5 de mayo es una fecha significativa en la historia de América: en primer lugar la Batalla de Puebla que marcó la victoria de las fuerzas del Ejército Mexicano comandado por Benito Juárez (presidente mexicano 1858 -1872) contra uno de los más poderosos y capacitados como lo fue el de la potencia francesa dirigido por el emperador Napoleón III Bonaparte.
Y por otro lado la derrota de Imperio Francés, la cual truncó los objetivos de extender la monarquía hasta Centro y Sudamérica para proveer de materia prima y comercio a Europa. En 1861 debido a la inestabilidad financiera, causada por la guerra mexicano-americana, el Congreso Mexicano acordó suspender los pagos de la deuda exterior durante dos años.
Los acreedores en Europa (Inglaterra, España y Francia) decidieron que la intervención sería la mejor manera de cobrarse la deuda. Más tarde, Inglaterra y España lograron negociar por la vía diplomática los términos y condiciones en los que se pagaría la deuda posteriormente.
Mientras que Napoleón III, gobernante de Francia, decidió invadir México para establecer una monarquía favorable a Europa. Con ese fin, debía disolver el Gobierno Constitucional Juárez y colocaría a un rey que respetara su autoridad, eligiendo para ello a Maximiliano de Habsburgo, quien no pudo aspirar al trono del Imperio Austro-Húngaro.
El Presidente Juárez le dio la orden al General Ignacio Zaragoza de detener el avance de las fuerzas armadas francesas en los fuertes de Loreto y Guadalupe cerca de la ciudad de Puebla.
El 5 de mayo de 1862, los cañones resonaron y los rifles dispararon y más de mil soldados franceses cayeron muertos. Los mexicanos habían ganado la batalla. Maximiliano finalmente fue derrotado y capturado el 15 de mayo de 1867; fue juzgado por una corte marcial y ejecutado por una escuadra de fusilamiento el 19 de junio de ese mismo año.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *